Sobre la subestación de Santa Marina: resolución del PCA en Mieres
Hace varias semanas, el Ayuntamiento de Mieres ordenaba a E.On la inmediata demolición de la subestación eléctrica construida en el barrio de Santa Marina. Parecía así culminar un largo proceso que comenzó en mayo de 2009, cuando el anterior gobierno local concedió una licencia de obra que, según el fallo del Juzgado de lo contencioso- administrativo número tres de Oviedo, ratificado después por el Tribunal Superior de Justicia de Asturias, vulneraba el plan parcial “Vasco-Mayacina” en el cual los terrenos en los que se ha construido el equipamiento eléctrico estaban considerados como un espacio de “uso público”, inicialmente reservado para el desarrollo de una zona de recreo. Además esta sentencia también reconoce que la subestación, según dicho plan, debió ubicarse en las inmediaciones del Pozo Barredo.
Desde que en otoño de 2010, comenzó la construcción de dicha subestación, muy cercana a varios colegios, un centro de salud y viviendas de trabajadores, los vecinos de Santa Marina, constituidos en una “Plataforma contra la subestación”, han llevado a cabo una lucha ejemplar en defensa de sus derechos. Esta lucha se concretó en distintas acciones, tanto en la calle, realizando concentraciones y paralizando pacíficamente las obras cuando estas apenas habían dado comienzo, como en las administraciones, llevando al Pleno Municipal una petición de moción, presentada por Izquierda Unida y aprobada con el voto del resto de fuerzas a excepción del voto en contra del PSOE (por entonces en el gobierno), en la que se exigía la paralización de las obras; y también presentando un recurso contencioso-administrativo contra la Administración local por conceder la licencia de obra a la compañía eléctrica, desencadenante de la sentencia que ahora obliga al consistorio a asumir la tramitación del derribo.
Pese a todo, el grupo energético, guiándose durante el proceso por el principio de “hechos consumados”, no solo ha finalizado la construcción del equipamiento, sino que éste se encuentra operativo desde hace varios meses, vulnerando la sentencia judicial y sin haber recibido por parte del Ayuntamiento los pertinentes permisos de funcionamiento. Además, ha pretendido realizar un doble chantaje con la intención de conseguir mantener la subestación en su actual emplazamiento. Por un lado, a los propios vecinos, enviando cartas a los domicilios del nuevo barrio de la Mayacina en las que advertía de que la posible ejecución de la sentencia les impediría poder garantizar el suministro a la zona. Y por otro lado, al Ayuntamiento de la localidad, ya que la multinacional alemana, con más de dos mil millones de euros en beneficios en 2012, ha hecho llegar a los medios de comunicación su posible petición de una millonaria indemnización económica por los perjuicios causados en caso de que finalmente deba acatar la sentencia.
Desde del Partido Comunista de Asturias consideramos que el gobierno de Mieres debe demostrar firmeza con objeto de que se cumpla la sentencia que obliga a derribar la subestación y que, por consiguiente, ha de emprender las acciones oportunas contra E.On por mantener en funcionamiento la misma de forma ilegal. Del mismo modo, estimamos necesaria la realización de una investigación que aclare todas las cuestiones referidas a la tramitación de la licencia de obra para construir la subestación, que culmine con un proceso de depuración de responsabilidades dentro del propio Consistorio.
Por último, y sobre todo, queremos subrayar el esfuerzo de los vecinos de Santa Marina, que han dado muestra de cómo con organización efectiva se pueden combatir las injusticias reales, siendo así sus derechos y aspiraciones reconocidos.