Fallece Manolín el de Llorío

Manuel Alonso González, Manolín el de Llorío, uno de los últimos supervivientes asturianos de la guerrilla antifranquista, acaba de fallecer en Laviana, su tierra natal, a los 97 años de edad. De familia campesina, militó en la Juventud Comunista desde los 14 años y, con sólo 18, se alistó como voluntario en las fuerzas de la República, combatiendo en los frentes de Asturias y el País Vasco. Tras la caída del frente Norte, fue uno de los muchos que, huyendo de la brutal represión desencadenada, se refugió en el monte, convirtiéndose en un fugao. Formó parte luego de los grupos organizados que, en condiciones extremas, resistieron denodadamente, en las montañas de Asturias, en defensa de la libertad. Fue miembro del conocido grupo de los Caxigales.

Tras casi ocho años de lucha, fue herido y detenido en enero de 1945, en una emboscada provocada, al parecer, por una delación. Condenado a muerte, como solía suceder por esos años, vio conmutada su pena por la de prisión, pasando por diversas cárceles a lo largo de veinte años y saliendo en libertad en 1964. En la etapa final de su vida, participó en numerosas actividades destinadas a homenajear y a recordar a los guerrilleros de nuestro país, los últimos -junto con los partisanos griegos- resistentes armados frente a la barbarie fascista en Europa. Era uno de los pocos guerrilleros o colaboradores directos vivos de la guerrilla en la región, junto con Felipe Matarranz o Samuel Sánchez El Cabritu. Ejemplo, todos ellos, de dignidad y entereza en la defensa de los ideales más nobles del socialismo y la libertad, en las condiciones más duras y los tiempos más difíciles.